La labor de defensa de derechos humanos en México, particularmente de la libertad de expresión, representa un camino sinuoso y complejo para víctimas, representantes legales e incluso autoridades. Desde Propuesta Cívica, organización que brinda acompañamiento y representación legal integral a periodistas y familiares víctimas de graves violaciones a los derechos humanos, hemos tenido la oportunidad de acompañar y litigar alrededor de 40 casos a nivel nacional; entre ellos, los homicidios de los periodistas Miroslava Breach Velducea y Javier Arturo Valdez Cárdenas, ambos asesinados en 2017 en Chihuahua y Sinaloa, respectivamente. Esta representación no habría sido posible sin el apoyo y confianza de las familias en Propuesta Cívica.
Gracias al trabajo conjunto que desarrollamos con la organización internacional Reporteros Sin Fronteras (RSF); periodistas que tuvieron un fuerte compromiso con el esclarecimiento de estos casos y se dieron a la tarea de documentar seriamente los avances en cada proceso, así como, con la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos en México y con la Embajada Británica, Alemana y la de Países Bajos, que se comprometieron al seguimiento y visibilidad de ambos casos, así también, gracias a que la Fiscalía Especial para la Atención de Delitos cometidos contra la Libertad de Expresión (FEADLE) cumplió con sus funciones, ambos casos reúnen un total de 4 sentencias condenatorias en contra de autores materiales y auxiliares del crímen, e identificación de los responsables intelectuales. A pesar de estos avances significativos, en ambos casos aún existen órdenes de aprehensión por ejecutar y procesos pendientes en contra de los autores intelectuales.
“Impunidad sistémica” tiene por objetivo mostrar un bosquejo del camino seguido por víctimas, autoridades y representantes legales en la búsqueda de justicia para Miroslava y Javier. Asimismo, tiene como finalidad transmitir los aprendizajes adquiridos en el esclarecimiento y judicialización de los casos, para lo cual se analizaron más de 36 tomos de expedientes y 99 horas de material de audio y video. El trabajo se planteó en 4 apartados: el primero relacionado a la metodología empleada, el segundo y tercero respecto a la revisión pormenorizada de las etapas de investigación llevadas a cabo y un último capítulo donde se detallan las buenas prácticas y las áreas de mejora en la investigación del delito de homicidio contra periodistas.
Tenemos la convicción de que esta publicación tendrá una recepción e impacto positivo entre operadores de justicia, víctimas, sociedad civil, asesores jurídicos y academia. Socializar los esfuerzos emprendidos en la representación de ambos casos sin duda abonará a la construcción de un mejor Sistema de justicia penal para periodistas y medios de comunicación en el país.