En México, el periodismo se ha convertido en una actividad de alto riesgo. La desaparición de un periodista y el asesinato de siete en los primeros cinco meses del 2017, sumado al ciberespionaje comprobado a personas defensoras de derechos humanos y periodistas, son hechos que reflejan la crisis estructural en la que se encuentra la defensa por la libertad de expresión y la poca eficacia de los diversos mecanismos de protección pese a los discursos gubernamentales en los que se asegura que el trabajo de la sociedad civil y el periodismo libre y crítico son indispensables para la construcción de un país democrático.

Frente a este panorama, asociaciones civiles, sindicatos y colectivos de periodistas se muestran como una alternativa de autoprotección cada vez más recurrente. El propósito de Trincheras para la libertad de expresión. Creación y trayectoria de colectivos de periodistas en seis estados de México es contribuir a la sistematización de la experiencia de once colectivos de periodistas localizados en estados considerados como de alto riesgo para el ejercicio periodístico, entre los que se encuentran Veracruz, Ciudad de México, Guerrero, Chihuahua, Oaxaca y Chiapas, los cuales están integrados por mujeres y hombres periodistas quienes a través de una serie de entrevistas narran la historia y las particularidades de las organizaciones, colectivos y redes de los que forman parte, el contexto en el que se crearon, los límites y alcances de su actuar y las amenazas que han recibido a causa de su labor, mismas que se han ido complejizando en un panorama que pareciera cada vez más desalentador y que nos invita a abandonar el silencio y apostar por un periodismo valiente y honesto.